RESUMEN: En la construcción de proyectos de gran importancia se han desarrollado, desde tiempos muy remotos hasta la actualidad, métodos de compactación y mejoramiento del terreno, con fines no sólo de estabilidad de las obras sino también con fines económicos. Actualmente cuando se pretende construir un terraplén, se tiene como condición básica alcanzar una densidad adecuada de acuerdo con el uso a que va a ser sometido. Para obtener ésta densidad se somete el suelo a la compactación y se controla esta mediante la determinación de la densidad seca en el sitio como un porcentaje de los ensayos de compactación desarrollados previamente en el laboratorio, y en la mayoría de los casos olvidando la importancia de la humedad del suelo en el momento de colocación.